Incontrolables empieza bastante bien. Su primer capítulo genera mucha expectación. Te presenta un mistero a priori interesante, con un elenco de personajes que parecen estar a la altura de lo que intuimos que se va a venir. Lamentablemente, todo se va desinflando, alargando la serie con 8 capítulos cuando con 6 o incluso con 5, sería suficiente para hacer una producción maravillosa.
El problema que he encontrado es en referencia a la historia que nos quieren contar. No sorprende en absoluto, pues ya en el 2º o 3º capítulo te lo ves venir todo, resultando una serie a veces tediosa de ver porque no hay nada que te mantenga con ganas de seguir viéndola, pues cada episodio que pasa reafirma tus teorías. Es cierto que hay alguna que otra sorpresa en referencia a algunos de los personajes, cosa que sí me ha gustado mucho, pero por lo demás es aburrida en más de una ocasión. Los personajes sí que los destaco. Hay más de uno que resaltan y tienen cierto enganche y sí que generan cierto interés.
El final es el esperado. No ha sido nada sorprendente. Cumple con lo que se pretende en sus inicios, sin ningún plot twist ni nada que sobreestaque.
Incontrolables por tanto ha sido una decepción, como muchas de las producciones de la plataforma de Netflix. Promete ser un thriller, con toques oscuros, que se consigue en su primer episodio pero poco a poco se pierde todo.
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