Tercer y penúltimo libro de la saga Escuadrón. Esperaba más de este libro. Ha sido interesante, pero siento que no ha estado a la altura de los dos anteriores.
En primer lugar, me ha parecido que el libro está compuesto por 450 páginas y que son innecesarias para lo que nos cuenta. En ningún momento digo que el libro no sea interesante. En absoluto. Pero creo que perfectamente podría reducirse en 100 páginas menos. La primera parte del libro resulta algo pesada y tediosa y rompe un poco con lo que nos veníamos encontrando en los libros anteriores.
La historia que nos cuentan es interesante, nos presenta un mundo fascinante y lleno de emoción y suspense donde aparecen nuevos personajes que me han parecido más que curiosos y me han gustado mucho. Están llenos de carisma y personalidad y acompañan en esta lectura a que junto a la protagonista hagan de esta historia, una lectura más que entretenida e interesante.
Los personajes, ha quedado claro que son lo mejor y más característico de todo. Vuelvo a resaltar a M-Bot, que sigue encantándome y maravillándome. Espero que siga estando presente con sus conversaciones, sus bromas y sus dudas de todo. Es uno de los personajes que más evoluciona junto a la protagonista.
Sin embargo, el inicio es muy lento, y se entretiene mucho para contar lo que ocurre al comienzo del libro, que podría resumirse y hacer más amena la lectura. Aún así, la segunda mitad remonta y se vuelve muy chula e interesante donde los personajes ganan fuerza y se desvelan varios secretos e información, al igual que conocemos más a la protagonista y sus habilidades. Es por ello que el final es muy chulo e interesante y te dan ganas de leer la última parte.
En consonancia con todo lo dicho, a modo de conclusión, decir que Citónica vuelve a sorprender. Quizá es la entrega más floja hasta ahora de la saga pero mantiene el nivel y te deja con ganas de más, dejando las expectativas altas para la secuela.
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