Empezamos el año con esta serie que de verdad opino que todo el mundo debería ver. Aunque la sinopsis que te muestran te hace parecer que es de fantasía, para nada es así. Esta obra cinematográfica está basada en un libro de Eloy Moreno. La serie aborda el tema del acoso escolar. ¿Lo hace bien? No lo hace bien. Lo hace genial.
Esta serie muestra una realidad que aunque muchas personas lo vean lejano, existe. Es real y lo peor es que ocurre igual que en la serie. En la serie se ve el acoso desde todas las perspectivas: desde el acosado, desde la del acosador y sus seguidores, desde la del instituto y sobre todo desde el punto de vista de la familia de la víctima.
Soy maestro de Educación Primaria y lamentablemente he vivido circunstancias difíciles, tratando con casos difíciles (aunque no tan graves como las de un instituto) y esta serie me ha dejado una marca. Una marca que difícilmente va a quitarse. Me han venido recuerdos de experiencias vividas durante mi adolescencia, el miedo al instituto, como no ser el típico puede hacer que no encajes, de como he visto a alumnos y alumnas de primaria sufrir porque los típicos graciosos la toman con esa víctima. Repito. No he vivido nada similar a lo de la serie, pero todos mis recuerdos que tienen alguna relación con el tema han resurgido. Es por ello que la serie me ha hecho sufrir, me ha hecho llorar en algún que otro momento de impotencia.
Esta serie debería verla todo el mundo y ser consciente de que el acoso no entiende de razas, de géneros, de etnia, de nacionalidad ... No entiende. Simplemente has hecho algo que al acosador no le ha gustado y ahí empieza todo. Cada vez la bola se va haciendo más y más grande, hasta que llega un momento que es difícil de parar. Esto puede tocarle a hijos e hijas, sobrinos o sobrinas, nietos o nietas, etc. Es por ello que desde los centros hay que actuar y erradicar este problema de raíz.
El papel de la profesora me ha encantado, y muestra la cruda realidad de los centros, de como hay docentes que quieren cuidar de sus alumnos o alumnas, se preocupan por ellos y se ven solos o solas ante un equipo directivo que no hace realmente nada, que para ese director o directora, estas cosas son cosas de críos, que hoy se pelean y mañana son amigos de nuevo. Cuando ya se descubre el pastel, se promete mucho, sobre todo de cara a la galería, a las familias. Se promete que estas cosas no van a ocurrir más, pero, ¿se ponen realmente soluciones? La respuesta es no. Se traslada a la víctima a otro centro y ya está solucionado el problema. Sin embargo, el acosador sigue siendo acosador, más aún si no se le descubre, cuando su ejército de fieles lo mantiene todo en silencio y los que no son seguidores suyos no hablan por miedo a futuras represalias. Algunos centros educativos, prometen estar pendientes y vigilar más en los recreos, en las clases, y en cada rincón del centro, pero realmente, estas promesas se las lleva el tiempo y todas estas palabras son solo eso. Palabras que se las llevará el viento y puede ocurrir.
Por fortuna, hay profesores y profesoras que están atentos antes estos indicios e intentan erradicar el acoso escolar, aunque hacerlo solo o sola, es muy complicado. El papel de la profesora en esta serie ha sido clave y de verdad que me ha encantado su personaje.
Así que esta serie de verdad que se merece mucho no pasar desapercibida. Que todo el mundo vea esta serie para abrirnos la mente y ser consciente del problema de nuestras aulas, donde cada día que pasa, el nivel de las tecnologías hace que el acoso escolar sea menos visible y por tanto, más difícil de detectar.
Mis felicitaciones de verdad a Eloy Moreno por su obra y los productores que han hecho posible esta serie, que de verdad aunque sea cruda en algunos momentos, muestra esta desagradable realidad que como ya he dicho, está cada vez más presente en las aulas desde edades cada vez más tempranas.